Un pie en el presente, la mirada en el futuro

25/04/2021Maica Rivera

Maica Rivera reflexiona en este artículo sobre las prioridades, retos e incertidumbres del mercado editorial en tiempo de pandemia.
Un pie en el presente, la mirada en el futuro
Foto de Lysander Yuen en Unsplash

El reciente estudio COVID-19 and Book Publishing: Impacts and Insights for 2021 (Cliff Guren, Thad McIlroy, Steve Sieck) corrobora lo esperable de los mercados, sin que el editorial sea una excepción: el mundo pandémico hace perder de golpe muchos puntos a lo analógico frente a lo digital, la brecha digital se acentúa, los pobres salen más pobres y los ricos salen más ricos. Lo que vemos hoy es una aceleración de los procesos que ya estaban en marcha ayer, un circuito digital hiperestimulado con una radicalización de sus efectos: las herramientas digitales que eran un valor añadido se han convertido en un factor determinante de supervivencia.

Reequilibrio online y offline

¿Coyunturalmente? No del todo. Es razonable esperar cierto reequilibrio de fuerzas online y offline cuando dejemos atrás la “nueva normalidad”. También pensar que lo analógico, incluso algunos valores del “cuerpo a cuerpo” (todo tipo de actividades presenciales) y “lo artesanal”, reales, cotizables, más allá de la romantización, volverán a recuperar posiciones tras la embestida pandémica. Cabe aguardarse la apertura de pequeños nichos en esa línea que harán suyos quienes sepan aprovechar “el efecto rebote” tras el tiempo de “estrés digital” y sobreexposición de los públicos -¿acaso alguien cuestiona que la sociedad saldrá exhausta tras haber sido obligada a una inmersión digital extrema en un tiempo récord?-.

Por si cabía alguna duda, apoyándonos en recientes análisis de expertos como Michael Bhaskar, especialista en nuevas tecnologías aplicadas al ámbito de la edición, todo apunta a que tampoco este apocalipsis hará que los eslabones tradicionales de la cadena de valor del libro dejen de conservar su lugar. Sin embargo, mantengan o no la vehemencia, las exigencias digitales llegaron para quedarse: ahí no tendremos vuelta atrás.

Seguir mejorando servicios en la Red

Contra todo pronóstico, y como noticia positiva del confinamiento, se elevaron los índices de lectura en nuestro país, según los datos arrojados por un informe de la Federación de Gremios de Editores de España. Tenemos un mercado editorial robusto en medio de la pandemia, a juicio de expertos como Edward Nawotka, editor de Publishers Weekly, en declaraciones para la Feria del Libro de Madrid 2020.

Añadido el hecho a todo lo anterior nos lleva a determinar que hay que seguir mejorando servicios en la Red y avanzar con una firme estrategia combinada, alternando intensidades según la evolución pronosticada, del online y el offline, en este tránsito al mundo poscovid que atravesamos.

Cuanto antes se refuerce la estrategia con actualizaciones claras y promoción de las mismas ante los usuarios, mucho mejor, por varias razones.

La primera, porque, ante el desconocimiento de cuánto durará el marco de “nueva normalidad”, se han de emprender acciones sin demora y hacerlas saber, para combatir el peor enemigo de los mercados, y del propio ser humano, que es la incertidumbre. Insistimos, no basta con hacerlo bien, hay que darlo a conocer.

Las otras razones orbitan en torno a la necesidad de no quedarse atrás en la evolución e imbricación de formatos (está claro que el comercio físico y el digital, como apunta Porter Anderson, redactor jefe de Publishing Perspectives, están llamados a entenderse) y, por supuesto, el no desaprovechar la coyuntura de mayor consumo de contenidos digitales –puede ser un momento clave para la fidelización–.

Hablamos, en definitiva, de una nueva etapa de un proceso de reconversión digital en el que la edición universitaria viene estando a la cabeza de la vanguardia en España y para el que tiene la infraestructura propicia y las directrices bien encaminadas con vistas a seguir estándolo.

Marca transnacional

Porque, al igual que la pandemia ha revelado muchas carencias del sistema, también está evidenciando los méritos visionarios de quienes hicieron cuando tocaba las apuestas al caballo ganador. Y éste es el caso de la edición universitaria española e iberoamericana, que, pionera, viene invirtiendo recursos, de lejos, en una fuerte apuesta por la omnicanalidad y especial atención a los ecosistemas digitales.

El exitoso recorrido de la UNE, con proyectos de modernidad como la plataforma conjunta de venta Unebook, corrobora la necesidad de seguir desarrollando estrategias digitales sostenibles con planteamientos que disten del cortoplacismo: un pie en el presente y la mirada en el futuro. Sin olvidar la idoneidad de fortalecer la red activa de colaboración entre afines en el marco de una edición universitaria de habla hispana.

Para alcanzar el objetivo popular de “salir más fuertes de la pandemia”, debemos salir, primero, más unidos: cobra más sentido que nunca la búsqueda de soluciones colectivas a las nuevas necesidades de interés común en este tiempo complejo; y de continuar haciendo, con ello, marca transnacional.

Para esto, sigue siendo asimismo muy necesario incentivar el compromiso institucional. Frente a la potencia arrolladora, ahora multiplicada, de los grandes grupos editoriales privados que acaparan casi toda la visibilidad de cara al gran público dentro del circuito comercial tradicional, las editoriales universitarias deben aprovechar sus ventajas propias, identificar muy bien sus comunidades digitales, y, además, dinamizarlas y movilizarlas con profesionales de alta especialización en el terreno de los contenidos sectoriales y el digital, en ese estricto orden (atendiendo a las consideraciones de Roger Chartier en el último número de la revista Texturas, donde avisa del riesgo, con la entrada de las nuevas tecnologías en el sector editorial, de ceder a manos ajenas la comunicación, que no deja de ser una dirección de contenidos).

Difusión eficiente de contenidos

Todo esto, unido a la revalorización social de las disciplinas científicas y la necesidad de una difusión eficiente de sus contenidos digitales en plena crisis sociosanitaria, revierte en un aumento del prestigio del libro universitario.

Éste es, por tanto, el momento para que los profesionales de la edición universitaria asuman tal prestigio y actúen en correspondencia a su más genuino papel de liderazgo al que están llamados: ser motores del pensamiento crítico y acreditar la difusión de voces de autoridad, procurándoles la máxima divulgación.

Esto pasa por tener las mejores prácticas en la Red, con el reto de alcanzar de lleno a los nuevos públicos, profesores, estudiantes, investigadores y lectores, que son nativos digitales.

Ecoedición

Asimismo, aquí cabe añadirse el desafío de editar el papel con criterios de ecoedición. No sólo porque “sin desarrollo sostenible, no hay futuro”, como argumenta Manuel Gil, Premio Nacional a la Promoción de la Edición Universitaria 2020 y actual director de la Feria del Libro de Madrid, en sendos artículos para la citada revista Texturas en curso y el número de diciembre de Publishers Weekly en español. También se trata de actuar con empatía y adelantarse a la nueva sensibilidad social emergente.

Gil nos remite en Texturas al nuevo informe del Instituto de Investigación de Capgemini, Consumer Products and Retail: How sustainability is fundamentally changing consumer preferences, para poner de relieve que la sostenibilidad tiene ahora un mayor peso en la agenda de los consumidores, quienes están cambiando sus preferencias de compra basándose en criterios de responsabilidad social e impacto medioambiental, algo de lo que no están ajenos los perfiles más jóvenes.

A su vez, de cara a este 2021, no puede dejar de subrayarse que es imprescindible que el libro universitario mantenga su participación en las numerosas ferias del libro en las que ha conseguido estar presente. Sea cual sea el formato, digital, presencial o híbrido, en el que éstas puedan realizarse.  

 

Maica Rivera

Maica Rivera

Maica Rivera es periodista, cofundadora de Literocio, directora de Comunicación de la Feria del Libro de Madrid y crítica literaria. En Twitter: @maica_rivera

1 artículo compartido

Suscríbete a nuestra Newsletter