
La lengua es nuestro territorio. Es el soporte de nuestra visión de mundo y de nuestra identidad; somos como somos porque hablamos una determinada lengua. Esto implica que la realidad existe porque tenemos la capacidad de nombrarla y hablar de ella, pero, para describirla y comprenderla, para explicarnos quiénes somos y resolver los diversos desafíos a los que se ha enfrentado la humanidad, la ciencia es crucial.
Nuestras lenguas son patrimonio intangible de nuestros pueblos, tienen el potencial de aportar saberes locales y perspectivas distintas, incluso únicas, desde diferentes partes del mundo. Por ello, los contenidos científicos publicados por las editoriales universitarias ponen de manifiesto la importancia de fomentar un mundo académico culturalmente diverso. Valorar la relevancia de esta producción es vital para reconocer la contribución del español y el portugués en el desarrollo mundial del conocimiento.
En el marco del XI Foro Internacional de Edición Universitaria y Académica “La comunicación de la ciencia: un compromiso de todos”, que se llevó a cabo
durante la Feria Internacional del Libro de Guadalajara 2024, las asociaciones de editoriales universitarias de Iberoamérica se reunieron y firmaron el Acuerdo de Guadalajara, con el fin de impulsar el reconocimiento del español y el portugués como lenguas científicas y propiciar la circulación de contenidos y publicaciones académicas tanto en el espacio iberoamericano como a nivel global.
Más de 500 editoriales universitarias
Firmaron este acuerdo representantes de 14 asociaciones de 11 países: Red Altexto (México), Ex Libris (El Salvador), Edupuc (Costa Rica), Aseuc (Colombia), Reude (Ecuador), EU Perú (Perú), Reduch (Chile), REUP y REUN (Argentina), ABEU (Brasil), Ausjal (jesuitas de América Latina), EULAC (América Latina y el Caribe), Clacso (América Latina), UNE (España) y APEES (Portugal), que entre todas integran más de 500 editoriales universitarias.
En esta reunión histórica, se hizo mención de proyectos conjuntos, desarrollados en los últimos 20 años, que visibilizan el quehacer cotidiano de las editoriales universitarias y de las asociaciones, y que son un referente de las alianzas entre nosotros y con otros actores de la industria editorial internacional: la plataforma Ulibros, que actualmente alberga más de 65 000 referencias de obras impresas y digitales de 13 países; Enlazadas, que tiene ya cuatro ediciones con mesas de diálogo y catálogos temáticos: género, medio ambiente, derechos humanos e historia, y que este 2025 se enfocará en salud; la participación individual y colectiva en ferias internacionales del libro y la realización de jornadas para profesionales; la relevancia del trabajo colectivo; la importancia del reconocimiento del multilingüismo en la ciencia; la transcendencia de la aportación de la edición académica y universitaria a la bibliodiversidad, a la ciencia abierta, y su repercusión en el debate público.
A través de este acuerdo se afianza la colaboración internacional para diseñar estrategias y aplicar herramientas de edición y difusión de los contenidos en acceso abierto, por medio de plataformas conjuntas que fortalezcan su circulación; para innovar e implementar los recursos y las tecnologías que faciliten el quehacer editorial y el uso responsable y ético de la inteligencia artificial; para construir un corpus del lenguaje científico y académico en español y portugués; para establecer vínculos con los principales agentes encargados de la evaluación de la ciencia con el objetivo de que se reconozca la calidad de las publicaciones académicas y científicas universitarias; y para velar por el rigor y la excelencia tanto en los contenidos publicados como en los procesos.
Agenda 2025 - 2030
Sin duda, esta reunión consolida las relaciones entre las distintas asociaciones de editoriales universitarias iberoamericanas, y este acuerdo sienta un precedente en los compromisos y las actividades de la agenda conjunta 2025-2030.
Es indispensable promover la firma y el contenido de este acuerdo entre los integrantes de las distintas asociaciones de editoriales universitarias y juntos impulsar el reconocimiento del multilingüismo en la ciencia, incluso podríamos realizar una campaña y utilizar una leyenda en nuestros libros haciendo alusión a que la ciencia se escribe y se lee en todas las lenguas.
Así mismo, habría que establecer nuevos acercamientos con las secretarías o los ministerios de ciencia y tecnología, así como con las dependencias de gobierno que intervienen en el financiamiento, la evaluación y la difusión de la ciencia en todos nuestros países, y darles a conocer el trabajo que hemos efectuado, con el fin de definir de manera conjunta estrategias que garanticen el financiamiento sostenible de la investigación y la producción y transmisión de conocimiento de manera continua y ética, al igual que su uso para el bienestar colectivo.
Defender el conocimiento como un bien público es una forma de combatir la desigualdad, estimular la capacidad crítica de las personas y promover la participación democrática. La ciencia es de todos y su divulgación es esencial para la construcción de una auténtica sociedad del conocimiento. Es una tarea que debe ser abordada por investigadores, escritores, científicos, comunicadores, periodistas y editores, con la finalidad de combatir la desinformación y compartir saberes que motiven a las personas a tomar acción y crear resonancias positivas en su entorno.
Sin libros no hay ciencia, sin conocimientos no hay conciencia, y sin conciencia no hay futuro.
Este artículo se publicó originalmente en Tendencia Editorial UR número 38 (2025): https://editorial.urosario.edu.co/pub/media/hipertexto/rosario/boletines-de-la-editorial/PDF/tendencia-UR38.pdf. Desde Unelibros Blog agradecemos a Juan Felipe Córdoba Restrepo, director de Publicaciones de la Universidad del Rosario, la gentil autorización para la reproducción de este contenido.


