En el mundo de la edición académica no es especialmente polémico afirmar que las ediciones digitales de monografías en abierto pueden mermar las ventas de copias impresas. Al fin y al cabo, ¿quién pagaría por algo que se puede conseguir de forma gratuita? Dichos libros ya venden una cantidad tan pequeña de ejemplares, y el mercado es tan desfavorable, que la disminución de los ingresos podría acabar por destruir un ecosistema ya precario. Dicho esto, algunas investigaciones apuntan a que los lectores prefieren el formato impreso para este tipo de publicaciones (véase, por ejemplo, la encuesta realizada por Ithaka S+R en 2018 y Words on Screen de Naomi Baron). Encontramos también informes anecdóticos que muestran que el acceso abierto en editoriales universitarias no afecta a la venta de publicaciones impresas. ¿Podemos analizar los datos de ventas de títulos en acceso abierto para descubrir si es cierto que las publicaciones impresas serán canibalizadas?
La asociación National Endowment for the Humanities ha financiado un proyecto de investigación para analizar de forma empírica si la disponibilidad de ediciones en abierto de monografías publicadas por editoriales universitarias repercute de forma cuantificable en las ventas de las ediciones impresas. Estaré trabajando con mi coinvestigador principal Erich van Rijn, de la editorial de la Universidad de Carolina del Norte (el cual ayudó en la redacción de este artículo), junto con la Association of University Presses (AUPresses), Roger Schonfeld (quien, a efectos de transparencia, contribuye de forma regular en esta web) y Laura Brown, de Ithaka S+R, para compilar datos e intentar sacar algunas conclusiones.
¿Son las monografías demasiado especializadas o demasiado caras?
El esfuerzo colectivo de las editoriales universitarias para publicar y distribuir monografías es una de las piedras angulares de la creación y el avance de la educación en humanidades y muchas de las ciencias sociales. De acuerdo con al menos un estudio, las editoriales universitarias publican más de 4000 nuevas monografías al año. Mientras que las ventas llevan varias décadas en decadencia, el desarrollo de redes de distribución digital en los últimos diez años ha creado la posibilidad de revertir drásticamente esta tendencia e incrementar la accesibilidad, uso e impacto de dichas monografías. Sin embargo, y a pesar de que gran parte de las publicaciones de monografías de editoriales universitarias se distribuyen simultáneamente en formato digital y físico, no ha habido un aumento notable en los beneficios. No se ha dado una gran expansión en el desarrollo de colecciones en bibliotecas académicas, a pesar de la disminución de los precios por título. ¿Justifica eso el argumento de que el contenido de los libros es demasiado especializado?; ¿o es el mayor obstáculo su precio? Si se pudiesen eliminar las barreras de pago de las ediciones digitales, ¿incrementarían de forma significativa su uso e impacto?
Las editoriales universitarias y la marginalización del acceso abierto
En los últimos cinco años han surgido un número de proyectos piloto de ediciones universitarias en acceso abierto, entre las cuales se incluyen la beca NEH/Mellon Open Book, TOME (Toward an Open Monograph Ecosystem), Knowledge Unlatched, NEH Fellowship Open Book Program y el Sustainable History Monograph Pilot. Sumándose a algunas nuevas y fascinantes start-ups, editoriales consolidadas como MIT, Michigan y California, han demostrado una gran iniciativa en ofrecer sus propios libros. Diversas fundaciones han aportado millones de dólares dirigidos a iniciar proyectos y apoyar el aumento de capacidad de formas de publicación en abierto. Es a raíz de estas y otras iniciativas por lo que hoy existen miles de libros publicados por editoriales universitarias que se pueden encontrar en abierto digitalmente y también a la venta en formato físico.
Si bien existe un deseo predominante entre los miembros de AUPresses de difundir publicaciones en acceso abierto, encuestas internas confirman que las editoriales mencionan que el mayor problema en la implementación del acceso abierto sería la creación de modelos de financiación. Incluso teniendo en cuenta los millones de dólares invertidos en experimentos, el acceso abierto permanece en la periferia del mundo editorial universitario, constituyendo menos del 5% de la producción de nuevas monografías. En un siempre desafiante entorno fiscal, la prevalente suposición de que las ediciones digitales abiertas podrían acabar con los beneficios ha coartado la expansión del acceso abierto, resultando en la represión de una parte sustancial de la educación en humanidades. Sin embargo, nadie aporta datos sobre la desaparición de las ediciones impresas, aunque sea de sentido común.
Y entonces la pandemia de la COVID-19 trajo consigo la inesperada oportunidad de llevar a cabo un experimento.
El inesperado experimento pandémico
Durante los primeros meses de la pandemia de la COVID-19, momento en el que estudiantes, docentes, académicos e investigadores fueron desterrados de sus respectivos campus y centros de investigación, plataformas como Books at JSTOR, EBSCO y Project MUSE invitaron a editoriales universitarias a ofrecer de forma gratuita y abierta sus monografías digitales a través de lo que llamaron «bibliotecas de emergencia». No todas las editoriales accedieron, pero muchas sí. Esto llevó a un experimento sin precedentes que tenía lugar en el mundo real, donde los proveedores podían comprobar el uso de libros que habían sido de pago pero que de repente eran accesibles de forma gratuita. Nadie se sorprendió de que las consultas aumentaran. Sin embargo, muchos de nosotros nos sorprendimos de lo mucho que se incrementaron las consultas, y de que la mayoría de ese crecimiento estaba teniendo lugar en regiones que, históricamente, carecían de acceso a esas obras. Simultáneamente, muchas editoriales experimentaron un aumento en la actividad de las imprentas. Fue un momento único, y puede que nunca seamos capaces de desentrañar todo lo que estaba sucediendo, pero durante esos meses en la primavera y el verano de 2020, cuando el mundo parecía desmoronarse, se desmitifica la idea de que las monografías de editoriales universitarias eran demasiado esotéricas para ser leídas. Estos libros circularon tanto digital como físicamente a escalas sin precedentes.
Lo que esperamos aprender
Incluso si es cierto que en situaciones más estables el acceso abierto merma los beneficios de las ediciones impresas, comprender el grado hasta el cual se reducen las impresiones puede ser un punto clave para crear subvenciones sostenibles para fomentar el acceso abierto. Pero si esto no es cierto —si el acceso abierto apenas afecta a los beneficios de las impresiones—, entonces se podría hablar de una oportunidad sustancial para expandir las publicaciones en acceso abierto. Sin embargo, permitámonos imaginar un resultado más sorprendente. ¿Qué pasaría si la detectabilidad online que trae consigo el acceso abierto llevase a un aumento en los ingresos de las obras impresas? ¿Y si el acceso libre a contenido digital se convirtiese en una herramienta de marketing que desemboca en ventas de libros físicos? ¿Podría existir un escenario en el que el impacto global de las monografías publicadas por editoriales universitarias aumente exponencialmente, llevando de la mano un aumento en los ingresos? Esto podría significar una transformación a gran escala en el futuro de la publicación de monografías y en el acceso a la educación en humanidades.
[Does Open Access Cannibalize Print Sales for Monographs? Editado originalmente en The Scholarly Kitchen, 27.01.22. Unelibros Blog agradece a John Sherer y al equipo de The Scholarly Kitchen la gentil autorización para la reproducción en español de esta interesante reflexión sobre un tema que está en la agenda diaria de la edición universitaria internacional]
Traducción: María Victoria Fuentes del Río & Olalla Rubines Chisca, doctorandas del Programa en Estudios Ingleses Avanzados: Lingüística, Literatura y Cultura (USC).